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  • Foto del escritorNuria Val

Libros 2022

Actualizado: 29 mar 2023

En diciembre de 2021 me atrapó el Covid-19 y de la noche a la mañana desarrollé el llamado "Covid persistente". Todo un año luchando contra las secuelas que el 'bicho' deja en algunas personas. Una de ellas es la pérdida de memoria a corto plazo y mi peor pesadilla: la pérdida de concentración y la incapacidad de leer. Así he estado medio año.


Quizás mi punto de inflexión fue mi enfermera, y ahora amiga, quien me insistió en no dejar la lectura, pese a las fuertes migrañas y la poca concentración/entendimiento. "Cuando te enganche una buena historia, volverás a la lectura", me dijo. Dicho y hecho. Le debo mucho a Saramago y su 'Ensayo sobre la ceguera'. Así volvió mi alegría, pese a mi débil salud, y hoy podéis cotillear la lista de las lecturas que en 2022 me han ayudado a evadirme del hospital.




Ensayo sobre la ceguera. José Saramago


Eternamente agradecida. Así me siento con esta novela que me enganchó de principio a fin, no ya por su historia, sino también por el 'estilo Saramago' de contarla.


Es impensable no leer la novela sin asociar algunos hechos a la reciente pandemia. "Ciegos que viendo, no ven" es una reflexión magistral para tratar distintos temas sociales.


Los protagonistas se enfrentan a enormes dificultades y permaneciendo unidos las afrontan no sin obstinarse. La gratitud y el no ser obstinado juegan un papel importante. "Si no somos capaces de vivir enteramente como personas, hagamos lo posible para no vivir enteramente como animales".


Adiós, señor Chips. James Hilton

Llegué a este libro por un 'booktuber' y valiente emprendedor de la editorial Trotalibros, Jan Arimany. Más tarde, descubrí que incluso existen varias películas. La primera en 1939 y la segunda de 1969 con Peter O'Toole, nada menos. El señor Chipping es un profesor entrañable. Me hizo llorar, reír y compadecerme.


Me quedo con esta frase: "Tengo millares de rostros en la memoria, las caras de todos los chicos del colegio. Si ustedes vienen a visitarme en los años venideros, como espero que harán, trataré también de recordar sus caras de adulto, aunque no les prometo nada (…). Les recordaré siempre como les conocí en Brookfield, ¿qué culpa tengo yo de que ustedes se empeñen en cambiar? "


El infinito en un junco. Irene Vallejo

Fue 'el fenómeno del momento'. Todo el mundo hablaba de él y me pudo la curiosidad. Mi paisana no solo nos habla de libros, también nos habla de ella, de cuando su madre le leía cuentos infantiles, de lo decisiva que fue su profesora de latín y griego en la adolescencia o de su estancia en Florencia y Oxford como estudiante.


Es un libro necesario porque va hilando numerosas analogías entre el mundo clásico y la época actual. Historia y filosofía (con mayúsculas). Esos contenidos que las actuales reformas educativos buscan eliminar.


El único fallo, en mi opinión, es que los contenidos no están bien ordenados o vuelve de nuevo a conceptos ya explicados.



Hábitos atómicos. James Clear

¡Boom Millennial! Eso me pasó leyendo este libro y coinciden más amistades, que también lo recomiendan. Ha llegado la hora de ir más allá de los típicos mensajes de tu madre o de los tutores diciendo que tienes que priorizar, crearte hábitos diarios para ser constante en la vida.


Nuestro comportamiento no sucede de manera espontánea, es el resultado de una acción inicial que desata una cadena de tareas. La idea fundamental de los hábitos atómicos es dar importancia a las pequeñas cosas que hacemos todos los días, y no pensar en transformar nuestro comportamiento y esperar grandes resultados de manera repentina.


Trabajo, esfuerzo, constancia, ser parte del proceso y no pensar que todo les viene del cielo. ¡Ah, y saber disfrutarlo!


Ya sentarás cabeza. Ignacio Peyró

¿Qué puedo decir de uno de mis mentores periodísticos? Ignacio Peyró se está enterando ahora mismo. Me leyó, le caí en gracia y me fichó para escribir artículos de opinión en The Objective cuando todavía no sabía apreciar lo que eso suponía.


Desde que publicó (Comimos y bebimos) le admiro como escritor. Mucho antes como persona. Sin duda, 'Ya sentarás cabeza' es mi libro. Me siento muy identifica como periodista con todas las anécdotas que cuenta acerca de nuestra profesión. Tan bonita y tan puta (con perdón).


Le gustaría saber que algunas escenas que relatan siguen repitiéndose, que los años no han pasado para muchas costumbres y los sitios y su olor permanecen intactos a pesar del paso del tiempo. ¡Cuánto he disfrutado! Gracias, maestro.


Populismo punitivo. Guadalupe Sánchez Baena

Es un libro que tenía pendiente y que cada día que pasa se revaloriza más. Un lúcido ensayo que demuestra cómo el populismo pretende terminar con la división de poderes y busca apropiarse de las funciones del Derecho Penal.


Quizás os suene: "El populista necesita primero apropiarse ideológicamente de reivindicaciones sociales extendidas entre la ciudadanía, en torno a las cuales intenta generar una alarma social artificiosa que conduzca al pueblo a exigir a sus representantes políticos cambios legislativos y medidas que acaben con el problema".


Es a partir de aquí cuando aseguran tener legitimidad para castigar conductas, sancionar y meterse en tu vida. Muy valiente. Muy bueno.


Los europeos. Orlando Figes

¿Cómo se va creando la cultura europea? ¿Cómo se establece el llamado canon europeo? Figes explica cómo se constituye la base de la alta cultura actual, no solo en Europa, sino en todas aquellas partes del mundo en las que hubo asentamientos europeos.


En el continente, había existido una cultura internacional entre las élites al menos desde el Renacimiento. Esta se erigía sobre la base del cristianismo, la literatura clásica y la filosofía, extendiéndose por las cortes, academias y ciudades de Europa. Pero no fue hasta el siglo XIX que pudo desarrollarse una cultura de masas relativamente integrada en todo el continente. No solo habla de cultura europea, también de su estrecha relación con el capitalismo y el mercado.




El imperio del dolor. Patrick Radden Keefe

¡WOW! No podía parar de leer. Es un libro que conforme vas leyendo, necesitas buscar más información y justo en época Covid, pues qué quieren que les diga. Tiras del hilo y van saliendo más cosas, como para hacer otro libro más actual sobre esta pandemia y algunas farmacéuticas.


Qué bien escribe, qué bien documentado está y cómo describe a los personajes. Además, el juicio es inminente. Se hicieron ricos a costa de 500.000 estadounidenses muertos desde la década de 1990.


Doctores/empresarios, los reguladores del gobierno que lo aprobaron, los representantes de ventas que azotaron las píldoras con mentiras y los médicos que les recetaron en cantidades escandalosas. Pasen y lean.



El rector de Justin. Louis Auchincloss


Llegué a él por la traducción de Peyró. Para qué nos vamos a engañar. Pero enseguida me enganchó.


Un internado inglés que, lejos de ser una novela complaciente donde los alumnos se unen contra la institución o aparece un profesor 'cool', muestra buenos retratos psicológicos de un profesor y un rector con la historia de los Estados Unidos durante la primera mitad del S.XX, la primera Guerra Mundial, los locos años 20, la brutal crisis del 29...


Una novela de distinguida prosa y valores, con un afilado, inteligente y crítico retrato de la clase dirigente norteamericana.






El mal dormir. David Jiménez Torres


Se lee en una tarde y deja pensativo. Pensaba que dormía mal hasta leer a David Jiménez y su calvario. ¡La de cosas que piensan los insomnes!


Apoyándose en la historia social y cultural del sueño, así como en vivencias propias y ajenas, este libro retrata la experiencia cotidiana del maldurmiente en una sociedad acelerada.


Me he sentido en muchos aspectos identificada y ya no me da pudor reconocer que duermo con una férula de descarga por mi hiperactividad y la ansiedad del día a día. De pequeña pensaba que era algo que tenía que esconder. Ahora, son pocos los que en mi profesión pueden presumir de no usar químicos para dormir.




Hamnet. Maggie O' Farrell


No words. Obra maestra. La novela es un monumento a la cotidianeidad de la vida, a esos momentos que sirven para presenciar acontecimientos históricos y también a la cotidianeidad del dolor, quizás del dolor más profundo de todos, el de la pérdida de un hijo.


"La crueldad y la devastación nos aguardan a la vuelta de cualquier esquina, dentro de un arcón, detrás de una puerta: saltan sobre una en cualquier momento como un ladrón o un bandido. La cuestión es no bajar nunca la guardia. No creer nunca que se está a salvo. No dar nunca por hecho que el corazón de tus hijos late, que tus hijos beben leche, que respiran, que andan y hablan, sonríen, discuten y juegan. No olvidar ni un momento que pueden desaparecer, que te los pueden robar en un abrir y cerrar de ojos, que se los pueden llevar como leves villanos".

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